La finca El Carabal pertenece al municipio de Alía, pequeño pueblo del sureste de la provincia de Cáceres. Está ubicada dentro de la comarca de Las Villuercas, cuya capital es Guadalupe, famosa por el Monasterio de Nuestra Señora de Guadalupe, declarado Patrimonio de la Humanidad.

 

Las Villuercas son el eje central de los Montes de Toledo y sus sierras separan las cuencas del río Tajo y Guadiana. Su diversidad geológica y su riqueza natural y cultural, la han llevado a ser declarada Zona Especial de Protección para Aves (ZEPA) y a formar parte del “Geoparque Mundial UNESCO Villuercas, Ibores, Jara”.

 

La finca se encuentra en las faldas de la Sierra de Guadalupe, una zona rodeada por diferentes sierras (S. Guadalupe, S. de las Villuercas, S. Altamira), los embalses de García Sola y del Cijara, el rio Guadalupejo, la cuenca del Guadiana y Cañamero.

 

Situada en un enclave privilegiado, rodeada únicamente por naturaleza y pequeños pueblos castizos, no está muy alejado de importantes ciudades (237km de Madrid, 145km de Mérida o Cáceres, 150km de Ciudad Real).

 

Tiene una superficie de 2.540ha (6.000 acres) y está formada principalmente por dehesas de encinas y alcornoques y zonas de monte, destinadas como coto de caza. También cuenta con varios embalses artificiales, realizados para acumular agua y garantizar el riego de las zonas de agricultura y la bebida para la ganadería y la caza.

 

Sus actividades se centran en la agricultura, la ganadería y la caza, actividad típica en Extremadura. El estado de conservación de la finca es excelente, ya que siempre se ha mantenido una filosofía de mejora del entorno medioambiental.

FINCA EL CARABAL

La vegetación de la zona forestal está compuesta principalmente por dehesas, zonas de matorral, pinos y pastos. La masa arbolada de las zonas de dehesa está formada por especies del género quercus, principalmente encina y alcornoque. El matorral es de tipo brezo o madroño, como especies principales, junto con arbolado tipo alcornoque y otras especies de matorral como la jara, lentisco y labiérnago.

 

Desde el año 1.993 se han llevado a cabo importantes reforestaciones. Dichas forestaciones ocupan una superficie de 300 hectáreas repartidas entre ocho parajes diferentes de la finca y las especies repobladas han sido alcornoque (73%), encina (21%) y quejigo (6%).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La actividad agrícola de la finca se basa en el cultivo en secano de cereales y leguminosas, cultivo en regadío de maíz, un olivar y un viñedo.

 

La extensión inforestal de la finca, está ocupada fundamentalmente por embalses de agua, cortafuegos, caminos, cerramiento cinegético y edificaciones destinadas a naves ganaderas, talleres, almacenes y viviendas.

 

Los más de 40 puntos de agua repartidos por toda la superficie de la finca, con una capacidad estimada de más de 300.000m3, garantizan el suministro para las actividades de agricultura, ganadería y caza.

 

Una extensa red de caminos de tierra facilitan el acceso a cualquier punto de la finca, ya sea para disfrutar de las vistas, para tareas de mantenimiento, vigilancia, o para un fácil y rápido acceso en caso de emergencias o incendios.

 

La finca El Carabal se encuentra a una altura media aproximada de 487msnm, siendo la cota más alta 563msnm y la más baja 395msnm. El suelo dominante es tipo Luvisol y cuenta con una orografía montañosa de relieves suaves y extensas rañas que forman diversos valles por los que pasan pequeños arroyos que desembocan en el río Guadalupejo. El clima, típico de la zona de Extremadura, define notablemente las estaciones secas y húmedas, la precipitación media anual es de unos 750mm.

DESCRIPCIÓN DE LA FINCA

Agricultura y Ganadería

La finca tiene superficie aprovechable para uso agrícola y de labor (agrícola de secano, agrícola de regadío y pastos) en las cuales se cultivan cereales y leguminosas. Los productos obtenidos son forrajes en pacas de heno, silo y paja, así como cosecha de grano de cereal.

 

Además de la producción de grano y forrajes, la finca cuenta con un olivar en secano y un viñedo (Carabal Viñedos y Bodega).

 

La explotación ganadera de la finca se realiza con animales de las especies ovino y porcino.

Caza

 

Los sistemas de caza empleados son la montería y el rececho.

 

Los cotos de caza constituidos en la finca disponen de un plan técnico de caza en vigor, cuyo fin es el de ordenar los aprovechamientos cinegéticos de los mismos, de forma que se garantice una correcta explotación de las especies objeto de caza, consiguiendo niveles poblacionales adecuados y equilibrados, logrando animales de calidad y asegurando la rentabilidad cinegética futura.

 

También hay un núcleo zoológico, área de cría y manejo de ciervo, muflón y jabalí, que en la actualidad se gestiona únicamente para el ciervo.